martes, 21 de junio de 2011

Justicia inteligible

El tema de ayer me lleva a otra consideración, y es que la justicia es menos justicia cuando el ciudadano no la entiende. También en este tema podemos pensar en cosas aparentemente triviales pero que podrían mejorar sensiblemente esta institución. Viene esto a cuento de muchas sentencias, demandas y otros documentos que he tenido ocasión de leer y que a veces son dificiles de entender incluso para los profesionales, y no digamos para el profano.

Los documentos judiciales están llenos de arcaísmos que no son más que un obstáculo para el ciudadano.  Por mencionar algunos ejemplos que me vienen a la mente: ¿Porqué escribir segundo otrosí digo en lugar de numerar sencillamente los puntos? ¿Porqué una serie interminable de considerandos, en lugar de numerarlos? También están los latinismos innecesarios. No veo razón alguna para decir abintestato en lugar de sin testamento. Ni para decir in dubio pro operario en lugar de en la duda a favor del trabajador. Y luego los tecnicismos. Tal vez haya un motivo para llamar a un contrato sinalagmático aunque suene a palabrota, pero no me parce muy correcto que a un ciudadano lego en la materia le digan que su demanda adolece de falta de litisconsorcio pasivo necesario, en vez de decirle lisa y llanamente que además de demandar a fulano tendría que haber demandado también a mengano.

Pero lo que más me preocupa es la aparente y lamentable falta de capacidad de algunos jueces y abogados para redactar un párrafo coherente, bien estructurado y correctamente puntuado. Si le vas a negar a un ciudadano un derecho o una pretensión, lo menos que puedes hacer es explicarle claramente tu decisión. Por muy legal que sea esa decisión, es difícil que el ciudadano la acepte si la sentencia es tan farragosa que no la entiende.

A menudo he pensado que la justicia podría mejorar mucho con una medida tan simple como un curso de redacción obligatorio para todos los profesionales del Derecho. Pero, pensándolo bien, el problema no es de la administración de justicia, sino del sistema educativo. Es inadmisible que una persona llegue a la universidad sin un dominio elemental del propio idioma.


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1 comentario:

  1. Comparto tu opinión. Somos pocos los que llegamos a segundo de bachillerato y no nos encontramos problemas con las diferentes asignaturas donde la expresión escrita se vuelve indispensable de la noche a la mañana: Composición histórica y filosófica, comentario crítico (tanto en gallego como en castellano) y redacción en lengua estrangera. Deberían de dejarse de tanta sintaxis y literatura en la ESO y trabajar más a fondo la expresión escrita.

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